Pintora mexicana; Coyoacán, México, 1907 - 1954

 

Frida Kahlo es sinónimo de dolor, Frida Kahlo es sinónimo de tragedia, pero también lo es de superación, de reinvención, de pasión y de color… mucho color. Con ver solamente una de sus obras, se conjugan la realidad con su sentir y su propia catarsis, ante el evento o hechos que ella pintaba.

 

Quien es capaz de plasmar toda su vida en una pintura? Ella lo fue, ella fue capaz, única, inigualable e irrepetible: Esa fue y seguirá siendo Frida Kahlo.

 

Frida nació en el año de 1907, con ascendencia mexicana y judía-húngara, lo que resulto en una interesante mezcolanza de cultura de dos mundos muy distintos. Su imagen lo reflejaba: sus facciones, su físico, su uniceja y su muy orgulloso porte con vestimenta indígena con sus vestidos coloridos y sus trenzas. Que hermosa eras Frida!.

A los doce años sufrió un accidente en tren, donde una barra metálica atravesó su columna vertebral y salió por su vagina, lo que la condeno a una vida de enfermedad, discapacidades, cirugías e infertilidad. Sin embargo, aquel hecho despertó las fibras más artísticas y sensibles de su ser, y en su convalecencia, comenzó a pintar. Lo cual hizo toda su vida, regalándonos obras de arte actualmente valuadas hasta en 6 millones de dólares;  como lo es su auto retrato “Raíces (1946)”, subastado en 5 millones 516mil dólares; o su auto retrato “Auto retrato con mono y perico (1942)” subastado en 3 millones 192mil 500 dólares.

Frida fue comunista, socialista, feminista y artista. La cual unió su destino con el famosísimo muralista y pintor mexicano Diego Rivera (1886-1957). De dicha relación resulto una bomba de arte, cultura, movimientos políticos y sociales, relaciones internacionales con la elite y fama a nivel mundial; así como de infidelidades, rupturas y reconciliaciones, los que hicieron a Frida inmensamente feliz, pero también desdichada. Frida una vez dijo «Sufrí dos graves accidentes en mi vida….Uno en el cual un tranvía me arrolló y el segundo fue Diego».

Frida también tuvo una relación estrecha con personajes de talla internacional como lo fue Leon Trotsky, el poeta Pablo Neruda, Nelson Rockefeller, Chavela Vargas, entre varios tantos más…

Frida murió joven, a los 47 años de edad, días después de haber seguido activa en el partido comunista de México, fiel a sus ideales. Ella misma comento «Cuando muera quemen mi cuerpo…No quiero ser enterrada. He pasado mucho tiempo acostada. ¡Simplemente quémenlo!».

El día después de su muerte, amigos y familiares se concentraron en el crematorio para asistir a la cremación de la artista más grande y más original de México. A punto de convertirse en un icono internacional, Frida supo cómo dar a sus fans un último adiós inolvidable. Mientras el llanto de sus admiradores llenaba la habitación, un súbito golpe de calor viniendo de las puertas abiertas del incinerador, causaron que su cuerpo se sentara. Su pelo, ahora en llamas, resplandecía alrededor de su cabeza como un halo. Los labios de Frida parecieron esbozar una seductora sonrisa mientras las puertas se cerraban. La última entrada de su diario reza : «Espero alegre la salida y espero no volver jamás – Frida».

Sus cenizas fueron colocadas en una urna, la cual se exhibe en la Casa Azul que compartió con Rivera. Un año después de su muerte, Rivera regaló la casa al gobierno mexicano para que se convirtiera en un museo. Diego Rivera murió en 1957. El 12 de Julio de 1958, la Casa Azul se abrió oficialmente como el Museo Frida Kahlo.

Larga vida a nuestra eterna Frida Kahlo.